La MUD
La oposición venezolana y no es exagerado decirlo se ha especializado en perder elecciones presidenciales los últimos 12 años, perdieron en el 98, perdieron en el 2000, perdieron en el 2006 frente a nuestro actual presidente, todas estas derrotas (y es una opinión muy personal) ha sido a causa de dos factores fundamentales: 1. El pasado criminal que tienen todos o casi todos los dirigentes de la oposición tradicional, que actúan hoy día como si Venezuela fuera la misma del año 1998, creen que al venezolano promedio se le ha olvidado los índices de pobreza que generaron en sus 40 años en el Poder, creen que es fácil olvidar que fueron los creadores de esa figura bastarda que luego se extendió por el cono sur, como lo es la desaparición de personas, olvidan ellos que no ha existido una clase política más atentatoria de la libertad de expresión que la que conforman adecos-copeyanos, los dirigentes de la oposición tradicional olvidan que llenaron las calles de Venezuela de sangre, pobreza y miseria, recibieron un país que se visualizaba ya, como el más desarrollado de este hemisferio y lo volvieron mierda (y perdonan el francés), creando ranchos, administrando pobreza, incentivándola, fueron incapaces de dotar a la patria de un modelo económico y social sostenible en el tiempo, lo de ellos fue una eterna improvisación, un eterno robo de los recursos del pueblo, convirtieron a gran parte del pueblo en una sociedad de pedigüeños, que no pueden proyectar su vida más allá de la “ayuda” del Estado, una sociedad que se conformo con poco, por ejemplo, con unas laminas de zinc, mientras la clase política y sus aliados construían de la nada grandes fortunas, se han tirado al pico no menos de 20 planes Marshall, ese mismo que fue el motor para la reconstrucción de toda la Europa luego de la segunda guerra mundial, nos robaron poco pues, claro todo este robo fue en nombre de la Democracia, la Libertad y todos esas bolserías, que al día de hoy siguen repitiendo, no promovieron la cultura de trabajo entre la masa “trabajadora” sobre todo entre la del sector público, los sindicatos se convirtieron en parásitos mantenidos por los gobiernos de turno, con los cuales firmaron contratos colectivos que fueron una parte de ellos una traición al patrimonio público y otra parte de ellos para incentivar la cultura de la flojera, de ganarse la vida sin mucho esfuerzo pero con los bolsillos llenos del dinero que en teoría le pertenecía a todos los venezolanos, esto sin contar las alocadas políticas económicas, que nos llevaron de la Venezuela Saudita a la Venezuela del Viernes Negro, Viernes que se ha extendido hasta el día de hoy, son famosas las historias de los venezolanos en el exterior que llegaban a los locales como los nuevos ricos del mundo, hasta que llego el año 89 una explosión social que nadie podía evitar, mientras al país entraban fabulosos ingresos fiscales provenientes del petróleo, está clase política en vez de invertir en Educación, Salud, Economía Productiva, en Defensa, se dedico a robar y robar y aparte de eso a pedir prestado, es decir, a endeudarnos más de la cuenta y a asumir deudas que no eran de la República, pero ya ese es otro cuento, es normal que se formara un gran problema social, representado en el tristemente famoso Caracazo y ni hablar de los graves problemas en materia de seguridad ciudadana, en la cuarta como en la quinta, mataban a los cristianos por un par de gomas, ahora matan a los cristianos por los teléfonos inteligentes, de esa matazon, de esa realidad social, salio al aire esa novela llamada “por estás calles”; todo lo anteriormente dicho saca como conclusión el segundo factor por el cual la oposición a conocido la derrota varias veces en estos últimos 12 años y no es otro que la falta de un proyecto nacional, y está falta se puede entender de la siguiente manera, si no tenían un proyecto nacional cuando eran gobierno como le podemos pedir que tengan uno siendo oposición, es imposible que lo tengan, ya que ellos ven el poder como un medio para el negocio, para repartirse el país como quien reparte una torta, ven al poder como la fuente segura de recursos para su beneficio propio o grupal, ellos no piensan en Venezuela, nunca lo han hecho, ellos piensan en ellos como personas y en su partido, son incapaces de realizarse un autoexamen y reconocer errores, acciones y procedimientos criminales, pero que se le puede pedir a una clase política opositora que se fue al “exilio” a mediados del siglo XX por carreteras de tierra y regresaron en 1958 por grandes calles y avenidas asfaltadas y gritando que el pueblo no comía carretera, democracia y libertad, vaya majadería, está es la misma clase política que suspendió las libertades económicas que ella misma había otorgado en la constitución del 1961 y ahora nos salen como los grandes defensores de un modelo económico que jamás impulsaron y que por lo tanto no existe, está es la misma clase política que se tira al suelo, a defender los “derechos políticos” de sus políticos ladrones porque los “inhabilitaron” y se olvidan que fueron ellos quienes inhabilitaron al General Pérez Jiménez de por vida, de cabrones (y sigan perdonando el francés) si está llena la clase política venezolana, estos que ahora lloran por los malandros políticos que están en el “exilio” entre los cuales se encuentra hasta un presunto violador de mujeres actualmente casado con la presunta autora intelectual del homicidio de un fiscal, como si esos “exiliados” fueran más valiosos que el Dr. Humberto Fernández Morán que estos adecos-copeyanos si que enviaron al exilio, haciéndole quizás un daño irreparable a la ciencia y tecnología venezolana, que bajo la administración del gran venezolano ya se visualizaba como la más desarrollada de toda la América Latina y cuidado sino del mundo; está es la historia (en resumen) de la clase política opositora tradicional, clase que cuando fue gobierno al final de su mandato entregaron al país a Hugo Chávez Frías, que bajo el gobierno del actual presidente de Venezuela se han dedicado más que a construir una alternativa, se han dedicado a realizar una oposición igual o quizás peor de lo que representan sus gobiernos puntofijistas, a veces se piensa que ellos pretenden volver al gobierno por los errores, las miserias y el desgobierno palpable de quienes hoy, por culpa de ellos mismos están en el Poder, los últimos meses se han dedicado a la política rastrera entre ellos mismos, se están repartiendo algo que aún no tienen, le dan prioridad a lo electoral antes que a lo económico-político-social, lo de ellos es una alcaldía para mi, una gobernación para ti, poco importa que política exitosa quieres realizar desde esa alcaldía o desde esa gobernación, como Venezuela para ellos no ha cambiado, ven las alcaldías y gobernaciones, como el banco personal y partidista y se nombra el tema de las alcaldías y de las gobernaciones porque es en lo que andan actualmente los “dirigentes” de la MUD repartiéndose en lomito que aún no tienen en sus manos, discutiendo que si tarjeta única o unitaria, como si con eso se fueran a ganar los votos del pueblo, quizás creen como ya se dijo que el poder le caerá del cielo gracias a la mala gestión pública que sufrimos los venezolanos y que los venezolanos victimas de esa gestión vamos a darle el poder así como si nada, de la MUD no puede salir un proyecto de país que contradiga diametralmente al socialismo del siglo XXI, dentro de ella se mueven intereses políticos y económicos de todos los colores y tendencias, el proyecto de país habrá que salir de algún candidato o de un partido político, con suficiente amplitud para presentarlo al pueblo y que se nutra del mismo pueblo o de la participación ciudadana, para los que no les gusta la palabra pueblo, el tiempo pasa y con ese pasar se acaba, para el 2012 sólo falta 5 meses y al día de hoy se hacen presentes candidatos que más allá de los limites de la oposición no arrastran ni un solo voto, analicemos los candidatos de la MUD uno por uno: (en la II Parte)
Dios, Federación y Constitución
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